LAS DOS HERMANAS DE AZUELO
Cuenta una vieja leyenda que: Vivían en Azuelo (Navarra)
dos huérfanas muy pobres, que estaban esclavizadas por su nueva madrastra. Era
tan mala su existencia, que un día aprovecharon un descuido de su déspota
carcelera y se fugaron de su casa para refugiarse en el monte a los pies de Codés. Se echó la noche y viendo la
madrastra que las dos muchachas no regresaban, roja de ira les echó una
maldición: << ¡Ojalá se vuelvan piedras!>>. Nunca jamás se volvió a
ver a las dos desdichadas hermanas. Pero la mañana siguiente de su desaparición
alguien que las buscaba, descubrió cerca del camino de Genevilla, dos enormes rocas, una grande y otra más
pequeña que hasta ese momento nunca nadie había reparado en ellas.
También
contar que muy cerca, hay otra gran mole caliza, que guarda la entrada al
conocido como Valle de los Penitentes
, dicen que es el abad de Otiñano,
convertido también en piedra por un personaje con el que tenía una seria
disputa, el enigmático Joanes,
también conocido como El Brujo de
Bargota , cura en la cercana localidad
de Bargota.
Si a este legendario decorado, le
añadimos una montaña rocosa, predominante, con personalidad propia, con unas
panorámicas para enmarcar y con caras influenciadas por climas distintos que
dan como resultado bosques variados de carrascas, robles y hayas, no
es de extrañar que sea una montaña muy visitada y apreciada.
Salgo desde una planicie herbosa dispuesta
como aparcamiento (799m.) que hay al O. un poco por encima del santuario
de Nª Sª de Codés (donde hay fuente) en ascenso, por una pista hacia el NO y tras
dejar a la derecha un corral, cojo en una bifurcación el camino de la
izquierda.
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| Vamos en ascenso, por una pista hacia el NO (con Peña Blanca al fondo) |
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| En una bifurcación el camino de la izquierda (el de abajo) |
Este bonito camino transita
con componente O. sin apenas desnivel por un precioso bosque de robles,
carrascas,
enebros y boj. Al rato el camino se convierte en sendero,
y la tupida vorágine nos envuelve. Poco a poco nos vamos acercando a las moles
calizas de Dos hermanas que se hacen notar por encima de la vegetación.
En 1,95Km de precioso paseo hemos llegado a la embocadura del Valle de los
Penitentes.
Apuntar que, a unos 100m hacia el O. (izquierda) tenemos el refugio Choza de los Pastores y la fuente de Sta. Engracia.
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| El Abad de Otiñano guardando la entrada y las Dos Hermanas a su derecha |
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| Valle de los Penitentes |
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| Refugio Choza de los Pastores y la fuente de Sta. Engracia a 100m a la izquierda |
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| Vista atrás |
Bien, se acabó el paseo y comienza el itinerario montañero, subimos por el camino con la fresca de la mañana y olor de la vegetación que nos escolta de encinas, coscoja y boj, a medida que vamos superando la pendiente, desaparece el camino y comienza un sendero. La senda transita por el caótico barranquillo escalando la escarpada ladera con continuos zigzag marcados por hitos. Vamos ganando altura con esfuerzo hacia un estrecho paso del anfiteatro pétreo. Al parar para coger el resuello y mirar hacia atrás, aparece ante nosotros en espectacular pasillo de roca que sobresale entre el verdor del bosque, y una visión magnífica del escondido valle de Aguilar de Codés, con los eólicos en la lontananza y más allá entre brumas, Viana y Logroño.
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| La senda transita por el caótico barranquillo escalando en zigzag (hitos) |
Nos hemos encaramado a una estrecha
loma rocosa suspendida sobre el espeso sotobosque que rodea la cabecera del
Barranco del Francés. Por este pasillo subimos con relativa facilidad
disfrutando de las vistas del valle al S. y las cumbres de la sierra: Peña Humada
(1155m.), Grudo (1363m.) y Joar (1419m.) de izquierda
a derecha.
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| Cabecera del Barranco del Francés (1363m.) y Joar (1419m.) |
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| Subiendo por la loma con Peña Blanca al fondo |
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| Valle de los Penitentes |
A una altura de 1160m sale un sendero
hacia la izquierda bajo la mole de Peña Blanca (1249m.), con su
característica ventana. Caminamos en ligero ascenso por encima del monte bajo hacia
la mole de Pico Royo (1297m.) que rodeamos por su ladera occidental.
¡Ojo!, antes de empezar a bajar,
recomiendo subir hacia la derecha campo a través 130m. hacia un despejado collado,
camino más asequible que el tomado por mí por los inestables canchales.
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| Sendero hacia la izquierda bajo la mole de Peña Blanca |
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| La ventana de Peña Blanca |
Salimos a una loma que separa los términos de Torralba del Río y Azuelo y solo nos queda trepar entre las rocas hasta la cumbre bajo la fea antena.
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| Aparcamiento de salida |
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| Torralba del Río y en primer término la loma a la que debeis subir desde la derecha |
La cumbre plana de Codés,
Joar o Ioar (1419m.) además del repetidor que se divisa desde kilómetros a
la redonda, tiene un vértice geodésico, un buzón montañero, placas y hasta una
cruz, pero lo verdaderamente destacable son sus impresionantes vistas.
Euskadi al N
con la boscosa ladera sobre Santa Cruz
de Campezo en primer término. Al NE la afilada Sierra de Costalera sobre tierras de Campezo
y la navarra Berrueza, al S. la
medieval Torralba del Río, más a la
derecha la bonita Azuelo con el Valle de los Penitentes en todo su
esplendor y hacia poniente la magnífica Sierra
Cantabria, etc.
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| Vertice Geodésico Codés, Joar o Ioar |
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| Valle de los Penitentes y valle de Aguilar de Codés al fondo |
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| Codés, Joar o Ioar (1419m.) |
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| Santa Cruz de Campezo |
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| Cuz de Joar y Sierra de Costalera sobre tierras de Campezo |
La bajada se hace muy gratificante por un marcado sendero revirado por el bonito hayedo, realmente fantasmagórico en días de niebla o con nieve.
Cuando llegamos al
límite del bosque, la pendiente aumenta y la senda se vuelve más pedregosa, precipitándonos
en el Collado de La Llana (1196m.)
con la mole del Pico La Plana (1337m.)
enfrente nuestro.
Ahora descendemos S. con cuidado para no tropezar ,por el
precioso Sendero del Puerto (GR)
de bajada en zigzag con la alucinante vista que nos distrae del barranco, las
pedreras ,los monolitos, el robledal,
las carrascas y con Desojo, Espronceda y Torralba al fondo.
Destaca a nuestra derecha el monolito de la Peña de los Cencerros donde una placa
recuerda a dos hermanos de Torralba que perdieron la vida intentando escalarla
en 1983.
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| Collado de La Llana (1196m.) con la mole del Pico La Plana (1337m.) detrás |
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| Capirote de la Peña de los Cencerros y detrás Torralba desde el sendero del puerto |
Tras la senda muy frecuentada en fines de semana, nos incorporamos
a un camino por el bosque, dejándonos ir por la pendiente hasta el lugar de
partida.
LA DESTRUCCIÓN DE CANTABRIA Y LA VIRGEN DE CODÉS
Dicen que
siendo ya viejo San Millán de la Cogolla
(vivió 101 años) bajó andando desde el tranquilo cenobio de Suso situado a las puertas de los
Montes Distercios (hoy Sierra de La
Demanda), con destino hacia la ciudad amurallada encaramada en un monte
sobre el río Ebro situada muy cerca
de la vieja Vareia ,conocida como Cantabria. El Santo intentó contar a
sus moradores, como Dios le había revelado que si no se arrepentían de su vida
pecaminosa serían borrados de la faz de la tierra. El caso es que, no hicieron
mucho caso y lo despidieron entre burlas. Sin pasar mucho tiempo de todo esto
(año 574), el arriano rey visigodo Leovigildo,
siempre en guerra con las díscolas tribus del norte, arrasó por completo la
impía ciudad.
Hoy solo quedan unas pocas ruinas sobre una elevación llana y polvorienta con acantilados frente a Logroño en el llamado Monte Cantabria.
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| Ruinas del Monte Cantabria de Logroño (hace unos años, ahora está un poco mejor) |
Pues
bien, cuentan que unos pocos de sus moradores católicos consiguieron escapar
con una imagen de la Virgen y se refugiaron en estos apartados parajes al pie
de la Sierra de Codés, creando el germen del hoy Santuario de Nª Sª de Codés.
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| Santuario de Nª Sª de Codés |
El Santuario de Nuestra señora de Codés de los s.XVI-XVIII con gran devoción en las comarcas cercanas, fue reconstruido tras los avatares de la Guerra de la Independencia y las Guerras Carlistas que asolaron estas tierras en el s.XIX. Dispone de hospedería, bar restaurante y anexo, está el Palacio de Lepe mandado construir por el Obispo de Calahorra en 1692. Es un magnífico destino para visitar o como punto de partida para diferentes rutas en cualquier época del año.
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