Es un verdadero placer visitar la naturaleza desbordante y
exigente de las “Viniegras”, en la
comarca de las 7 Villas del Alto
Najerilla, que unida a la arquitectura de sus bellas localidades, conforman
un coctel fantástico que siempre deja huella.
Viniegra
de Abajo es un pueblo muy cuidado y con preciosas Casas de Indianos
o como dicen por aquí “de Americanos”,emigrados a América en los s.XIX y XX.
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| Fotos de Viniegra de Abajo gentileza de Eva M.H. |
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| Escuelas de Viniegra de Abajo |
Pero también buenos ejemplos de Casas Solariegas, que pertenecieron a una élite relacionada con La Mesta y la
Trashumancia de ovejas merinas.
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| Viniegra de Abajo |
Merecen desde luego, un paseo sosegado y pausado para admirar
su bonita arquitectura recorriendo sus empedradas y limpias calles, plazas y fuentes, etc.
A la salida del pueblo, dirección a Viniegra de Arriba otra localidad con buenos ejemplos de construcciones serranas, hay un aparcamiento a la derecha donde
podemos dejar el coche.
Andamos unos 210m por el arcén de la carretera LR-333 hasta cruzar hacia la derecha por un puente de
piedra sobre el río Urbión. Antiguamente
este comunicaba con un lavadero, quizás de lana, de ahí su nombre Puente del Lavadero (880m.) y que ahora
da paso peatonal hacia una explotación ganadera.
Vamos rodeando hacia la derecha por la pista un
pabellón, con la banda sonora de los perros que nos ladran al detectarnos.
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| Puente del Lavadero |
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| Río Urbión |
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| Antiguas fincas hoy colonizadas por el matorral |
Después de una valla, hacia la izquierda arranca un sendero
marcado con marcas azules y blancas. Va a ser nuestro fiel compañero
por el intrincado recorrido de la ladera Oriental del pico Collaranzas colonizada
por magníficas encinas.
He de advertir, que mientras ascendemos por este verdadero
laberinto de sendas, a pesar de llevar el track en el móvil o GPS, hay que estar
atentos a las marcas (muy oportunas) para que la subida no se nos complique.
El marcado sendero al ir tomando altura, nos conduce después
de un tramo de antiguas fincas hoy abandonadas y colonizadas ahora por el monte bajo, junto a bellos ejemplares de
centenarias carrascas y al ir tomando
más altura encontramos a los robles quejigos.
Al final de nuestro entretenido ascenso con varios zigzag, vamos a salir
a una zona despejada por encima del bosque, donde encontramos una pista
que seguimos subiendo hacia la derecha.
Se agradecen las vistas que ahora disfrutamos, caminando hasta
subir a unas praderas
entre monte bajo. Nos quedamos
por debajo de las rocas del pico Collaranzas o Teilo (1383 m.), justo en el pequeño collado de Collaranzas (1380m.).
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| Zona despejada por encima del bosque |
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| A pocos metros del collado de Collaranzas |
Es el momento de tomar impulso dirección S. para ascender
por una trocha de saca junto al límite del pinar
a nuestra izquierda, para
irnos abriendo paso entre la vegetación que casi la invade.
Poco a poco, salimos a una zona despejada de praderas, para comprobar que ante
nosotros se muestra contundente el subidón (con porcentaje del 30%) que nos
aguarda a continuación. Hay que poner el “modo tractor” y abordar la subida sin
prisa pero sin pausa, ya que es exigente.
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| Vieja trocha de saca |
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| Contundente subidón (con porcentaje del 30%) |
En la parte de arriba recobrado el
resuello y secado el sudor, vemos a lo lejos un mojón de piedras de una
antecima. A nuestra izquierda podemos apreciar abajo en una zona en la que se
abre un poco el valle, la preciosa localidad de Viniegra de Abajo.
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| Mojón de piedras de una antecima |
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| Aún queda un poco más |
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| En el valle, la preciosa localidad de Viniegra de Abajo |
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| ¡Por fín la cima! |
Seguimos la dirección SE del cordal encaminándonos hacia la
cima del Pico Alcaste, Caste o Gurrincheta
de 1785m. La panorámica es fantástica y merece el esfuerzo invertido. Los
Picos de Urbión, Cebollera, Camero Nuevo y Sierra de La
Demanda impresionan desde esta privilegiada atalaya. Hemos ascendido por un
cordal que separa el Río Urbión y el
poco transitado Valle del Río Portilla.
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Pico Alcaste, Caste o Gurrincheta de 1785m.
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Es hora de regresar, desando el camino que con tanto esfuerzo me
ha traído hasta aquí, intentando no tropezar para no rodar por la pendiente. Marcho
embobado con varias manadas de ciervas y ciervos que se cruzan ante mí,
saliendo del pinar camino del Valle del Portilla. Llego otra vez al collado de Collaranzas, donde se cruzan
varios caminos entre los pastizales,
mientras la luz de la tarde va decayendo.
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| Al fondo,el Mojón de piedras |
Ahora para bajar, tras tomar un corto atajo hacia la
izquierda, lo hago siguiendo una pista que recorre el fondo del
estrecho vallejo rumbo N., escoltada por farallones rocosos. Tras arrimarse a
la ladera derecha, volvemos a bajar al fondo. Seguimos siempre bajando la pronunciada
pendiente del Valle de La Calle por
la pista forestal.  |
| Corto atajo hacia la izquierda,para bajar a la pista |
Así entre encinas
desembocamos junto al pabellón de ganado y un poco más adelante en el puente del lavadero del comienzo de
esta exigente (moderada+) y espectacular ruta montañera “exprés” a pie.
