Nalda-Peña Aldera-Coll.del Mallo-El Viso-Peña Saida-Chozo Blanco-Torrecilla en Cameros-Senda Romana del Iregua-Viguera--BTT

Esta complicada ruta de bicicleta de montaña,ha sido una experiencia tan grande, tan sublime, tan magnífica…y a la vez tan brutal (IBP 157BYC) con sus más de 1600m de desnivel acumulado ,que será difícil de olvidar…

En previsión de que nos pudiera “pillar el toro” tomamos la decisión de partir desde Nalda para ahorrarnos así algo de tiempo. Al final casi dio igual, ya que la minutada fue de órdago y yo terminé fundido.

Salimos tarde (9:45) desde la carretera de Nalda a Viguera (562m.) subiendo hasta los aledaños de la ermita de la Virgen de Villavieja. Remontamos Barranco del Chorrón de San Marcos (camino de Nalda a Trevijano) con una helada cojonuda, la fuente de Cubaldón (765m.) estaba congelada.

La fuente esta congelada

Seguimos ascendiendo entre los pinos por la pista que nos conduce hacia el collado a 1099m de altura encontrando el camino de Clavijo a Luezas. Cruzamos la cancela entrando en Soto en Cameros, continuando la subida cada vez de forma más costosa (500m al 18%) hasta las cercanías de Peña Aldera (1242m).

Collado a 1099m de altura junto al camino de Clavijo a Luezas

El barro fue el protagonista desde el principio hasta el final

Vistas desde el collado junto a Peña Aldera (1242m)

Las vistas son reconfortantes en el luminoso día, además ahora toca bajar hasta el dolmen del collado del Mallo (1143m.), enterramiento megalítico de entre el 3500-2300 AC.

Continuamos nuestro largo viaje subiendo y desviándonos hacia la derecha por la pista próxima al Cerro del Huevo y Fuente Haya. Ciclamos en subida hacia el W que se va endureciendo cada vez más hasta el collado con un cartel que marca El Viso (1295m.). Las vistas de Peñas Valderas, de los bosques de pinos y del valle, bien merecen el esfuerzo.

Dolmen del collado del Mallo a 1143m. de altura

Ciclando por la muga de los dos Cameros

Ciclamos ahora un corto tramo por la ladera N evitando el barro acumulado en la pista, entre El Somero y Serrezuelo, llegando a otro colladito (1270m.) sobre la aldea de Luezas.

Atravesamos la ladera por una estrecha senda que entre pedreras nos deja en un nuevo collado (1246m.). Sin perder tiempo subimos de nuevo para descender por el empinado camino de tierra que nos deja en el gran collado (1220m.) que en los mapas viene reflejado como El Viso y de donde parten caminos hacia Luezas al SE, hacia el N, el camino de Valdeluezas (“senda Bonita”) y hacia el NW el camino de Luezas a Cerro Arao (“senda Preciosa o senda Luezas”).

Nosotros empujamos nuestras bicis subiendo por el estropeado camino pasando de la jurisdicción de Nalda a la de Viguera marchando rumbo W, cruzando una nueva cancela por debajo de  Peña Saida (1372).

Bajar para subir

Las panorámicas son impresionantes, ciclamos por la divisoria de aguas entre el Leza y el Iregua  siguiendo nuestra ruta hacia el W entre el Camero Viejo y el Nuevo, hasta cortar (1309m.) el camino de Viguera a Montalvo.

Camino de Viguera a Montalvo

Tenemos a la vista Cerroyera pero aún queda mucha pista sube-baja para llegar.

 Cerroyera a la vista

Pasamos junto a lo que queda del dolmen de Collado Palomero I (1285m.) y nos acercamos más adelante al de Collado Palomero II (1230m.), algo más evidente.

Dolmen de Collado Palomero I (1285m.)

Colmen de Collado Palomero II (1230m.)

Más adelante al llegar al Chozo Blanco (1216m.), la curiosa construcción que se asemeja a una tienda mongol ,nos recuerda que estamos en plena Cañada Real Soriana Oriental .Estamos junto al casi desaparecido camino que unía Viguera y Santa María, por encima del murallón de Peña Puerta en un apacible y bucólico lugar, rodeados de pastizales y con fuente cercana, donde pasta el ganado.

Chozo Blanco (1216m.)

Se acabó el descanso y continuamos subiendo por la pista hacia el collado (1301m.) al S de Cerroyera, sopesamos las alternativas, ya que vamos muy retrasados y lo que queda es mucho y no fácil.

Decidimos continuar adelante con nuestra aventura descartando “el último escape”, a pesar de que las fuerzas están mermadas y nos puede caer la del pulpo, ¡de perdidos al río!

Bajamos raudos por la larga pista entre el precioso bosque de carrascas y quejigos en la solana y rebollos, boj y algún haya en la umbría hacia Torrecilla en Cameros, extremando el cuidado en varios neveros.

Extremando el cuidado en varios neveros

Bajamos por la larga pista entre el precioso bosque de carrascas y quejigos

Y así nos incorporamos (850m.) a la magnífica senda conocida como Vía Romana del Iregua y tras subir a un pequeño alto, descendemos hacia Torrecilla, aprovechando para avituallarnos junto a las ruinas de la iglesia de Nª Sª de las Vegas.

Torrecilla en Cameros

Ruinas de la iglesia de Nª Sª de las Vegas

Continuamos desde Barruelo ahora hacia el NE, por la preciosa y larga senda Romana comprobando como en este sentido hacia Viguera NE es más costosa y pasa factura a nuestros ya castigados cuerpos. El paisaje es soberbio y las sensaciones son magníficas a pesar del esfuerzo.

Senda Romana del Iregua

Cuando ya se acaricia el monte Castillo de Viguera y se sale de la vorágine, el camino se ha convertido en una ciénaga, a duras penas consigo empujar por espacio de un Km la bici atascada en el barro y acabo con un pajarón de campeonato.

Vía Romana del Iregua

Los colegas esperándome, ya que me he "hundido en la cienaga".

Tras salir del entuerto, quitar el barro que atasca ruedas y cambios, tras descansar, comer y beber un poco, proseguimos subiendo hacia el collado (907m.) que une el Castillo de Viguera y el Palomar.

Viguera

El descenso por la pedregosa pista hasta la fuente junto a la plaza Viguera (688m.), ayuda a soltar adrenalina y a limpiar las máquinas. Continuamos bajando hacia el lugar donde hemos aparcado hace 8h y 48 minutos,(7:10´en movimiento).

Recomiendo echar un vistazo a:
Caminos y sendas a Cerroyera (Viguera) -- BTT
Logroño-Cerroyera-Peña Puerta--BTT

San Román-Montalvo-Chozo Blanco-Torre-Santa María en Cameros--BTT

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Un auténtico rutón, condicionado por el desnivel acumulado y el abundante barro (no hace mucho la nieve campaba a sus anchas) que me sacó de quicio, que atoró nuestras máquinas y nuestras fuerzas.

Sarna con gusto no pica. J