Esta ruta, que se divide en tres partes
(3 días), fue una actividad largamente esperada por mí y que ha sido posible
gracias al interés, planificación y resolución de mi cuñado.
Tenemos mucha suerte de contar con un
magnífico GR
93 y su variante más montañera GR 190, que recorre de forma
longitudinal la Sierra riojana.
Hemos querido recorrerlo en un tránsito a pie de forma autosuficiente,
con mochila de 50 litros (agua, comida, hornillo, ropa, esterilla, saco, etc.)
y de Este a Oeste. Es un viaje desde nuestro oriente más próximo a
poniente, desde las magníficas huertas y vegetación de ribera
del Alhama, pasando por
vegetación mediterránea como pinares, encinares y pequeños bosquetes de dehesas, tímidas
alegrías entre grandes extensiones deforestadas con olor a jara, tomillo y espliego del Camero Viejo y desembocando en los
impresionantes bosques atlánticos de pinares, robledales y hayedos del Camero Nuevo. Un viaje que nos cuenta a quien queramos escucharlo,
su biodiversidad, su pasado próspero, su abandono y porque no, su regeneración.
La actividad del primer día era ambiciosa ya sobre el papel, poco más de 46Km por monte, y la verdad, resultó casi extenuante debido al intenso calor y al peso acarreado. Nos fue primordial alguna botella de agua proporcionada en Cornago (el agua de la fuente era muy dura) y las fuentes de Ambasaguas y Navalsaz para poderla llevar a buen término.
Llegamos muy temprano a Cervera de río Alhama en coche
particular. Las combinaciones para llegar en autobús a una hora aprovechable no
nos convencían.
Son las 6:36´AM, y desde el angosto
caserío que recuerda su pasado musulmán, subimos pasando por la iglesia de Santa Ana a la parte
superior del cresterío rocoso, (La Peña) donde aguantan a duras penas los
restos de su castillo junto a varias
cuevas.
Transitamos con la fresca por un terreno
sobre explotado de viejas huertas, algunos almendros, olivos y
alguna viña.
Cervera de río Alhama |
¡Amanece!, que no es poco |
Caminamos fácilmente a media ladera entre
viejos bancales por el marcado y balizado sendero que nos baja al bonito barranco
de la Canejada, donde nos encontramos con la pista que viene de Rincón de
Olivedo.
Al poco llegamos al modesto y solitario
despoblado de las Casillas de San
Esteban (de Canejá) y seguidamente continuamos en ascenso por un buen
trecho. Recuperamos de nuevo el rumbo con componente oeste, hacia los
omnipresentes aerogeneradores de la Sierra
de Alcarama.
Barranco de la Canejada (de Canejá) |
Casillas de San Esteban (de Canejá) |
Cuando la mañana quiere empezar a
calentar, llegamos a un bosquete de encinas y más adelante un bosque de pino de repoblación, el Monte umbría del Cántaro y a una pista que nos hace ir más raudos y por la umbría del Barranco de Carnazún.
Llegamos así hasta una casa vallada solitaria y volvemos a ascender hacia los próximos aerogeneradores.
Encinas |
Pino de repoblación en la umbría y encinas en la solana |
Tras la loma... |
Alcanzamos la base de los molinos, iniciamos un duro recorrido por terreno en general
deforestado, invadido por el matorral, alguna coscoja, aulagas, enebros y las olorosas jaras.
Atravesamos una pista y nos dirigimos hasta el fondo
del Barranco de Peña Higuera, donde
encontramos al poco unos muretes de piedra pertenecientes a unos corrales.
Caminamos por la ladera de
solana sin protección contra el sol de alguna vegetación. Ascendemos hacia
al collado de Valcenón y a las lomas
desde las que se divisa el valle.
Barranco de Peña Higuera |
Camino hacia el collado de Valcenón (vista atrás) |
Y poco
a poco, vamos descendiendo hasta que de repente, podemos admirar una buena
estampa de nuestra primera parada larga. Como si de una aparición se tratase,
se nos presenta Cornago, con su caserío apretado al cerro, bajo su iglesia
de San Pedro y su precioso castillo perteneciente en su día a
Álvaro de Luna, “Señor de Jubera y
Cornago”.
Tras cruzar por el puente del Matadero, raudos buscamos una fuente, pero nos aconsejan que no bebamos mucho y nos dan una botella de agua fría, cosa que para nosotros tiene un gran valor y lo agradecemos sobremanera, llevamos 23 Km y 6h.15´dándole.
Tras avituallarnos a la sombra, valoramos nuestras fuerzas y sopesamos el intenso calor que hace y... nos decidimos a continuar.
Cornago |
Son las 14:35´cuando proseguimos por carretera a Valdeperillo y al llegar cruzamos el río Linares por un puente e iniciamos el ascenso.
Subimos a media ladera por el Barranco de Valcarnera, que a fe, se convierte en una auténtica caldera para nosotros. Buscamos la sombra de algunas carrascas para beber, apaciguar el sofoco que llevamos y aliviarnos del peso de las mochilas por unos momentos.
Por fin, llegamos tras poco más de 3Km desde Valdeperillo al portillo, y admiramos el panorama recorrido y el que nos queda por recorrer.
Valdeperillo |
Barranco de Valcarnera |
Dejamos la carretera que recorre la Sierra
de Achena camino de Enciso e
iniciamos un merecido descenso, primero por senda y más adelante por pista
terrera, entre una apretada vegetación de carrascas y coscoja.
El camino poco a poco nos aproxima al arroyo Vallaroso y empiezan a aparecer
las primeras fincas
abandonadas cubiertas por el matorral.
Sin prisa pero sin pausa llegamos al
interesante caserío de piedra de Ambasaguas, con rincones pintorescos
como el puente que da acceso a la iglesia
de San Juan, su lavadero y varias calles empedradas, constituye un
despoblado que poco a poco merece su revitalización.
Ambasaguas y su fuente se
convierten para nosotros en un “oasis en el desierto” y nos lo tomamos con
calma, hacemos una buena parada para avituallarnos y descansar a la sombra.
Primero una senda y despues un camino |
Ambasaguas y su fuente , un “oasis en el desierto” |
Seguimos la señalización rojiblanca del GR 93 tomando rumbo Oeste paralelos al arroyo. Remontamos el barranco por la margen
izquierda en moderado ascenso con apenas vegetación, algunos árboles de
ribera y unas pocas carrascas. Cuando llegamos al barranco de la Sierra del Palo con más
vegetación, acometemos de frente, un repecho más exigente. Observamos en
la subida las icnitas del León de
Andorra al otro lado del barranquillo.
Llegamos a una pista y después a la carretera
que une Cornago con Enciso.
Arroyo Vallaroso |
Icnitas del León de Andorra |
Pista y después a la carretera |
Giramos a la derecha por pista de grava para entrar por un pinar de repoblación
en Navalsaz, otra aldea que
ha ido regenerándose en los últimos años y que guarda bonitos rincones. Salimos
dejando a nuestra izquierda la iglesia
de Santiago hoy en ruinas, en dirección a la carretera.
Navalsaz |
Nosotros ya no abandonamos la carretera aunque el GR sale y vuelve a
ella en varias ocasiones. A la altura de la ermita en ruinas del Cristo del Valle hacemos el último descanso en
un área recreativa.
Continuamos por el asfalto dejando a la
derecha la aldea del Villar de Poyales .
Ermita en ruinas del Cristo del Valle |
Icnitas |
El Villar de Poyales |
Icnitas deValdecedillo |
Año 2009 |
Nos hemos dado un buen tute, para ser el
primer día...
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Próximamente: Enciso-Munilla-San Román de Cameros
Joder que paliza! Bueno, a partir de aquí os queda la parte más bonita, espero las siguientes entregas. Yo llevo la tira de años para acabarlo, empezé a hacerlo con un amigo pero nos juntamos de ciento en viento y no hay manera de avanzar. Nos queda la parte justo por donde empezásteis vosotros.
ResponderEliminarHola tocayo, a mi me pasaba como a ti,no había forma de acabarlo.En mi caso lo había hecho desde Ezcaray hasta San Román .Hemos flipado con la variedad y riqueza en paisajes que tenemos,somos muy afortunados...
EliminarSaludos montañeros.